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Cosas tan simples...

Aveces la vida no parece ser justa, de hecho la mayoría de las veces no lo es.
Suceden cosas que no esperas o cosas que jamás quisiste que sucedieran.
Aveces perdemos personas a las que queremos y aunque algunas veces puede ser nuestra culpa, algunas otras pasan solo porque sí.
Algo que no es nuevo pero que aveces olvidamos es que en esta vida casi NADA puede darse por sentado.
¿Cuántas cosas no nos perdemos de disfrutar sólo porque pensamos que estarán allí para siempre?
Ponte a pensar:
¿Cuántas veces en lo que llevas de vida te has detenido a admirar la belleza de la naturaleza que Dios creó, o cuantas veces te has tomado unos minutos para mirar la puesta de sol a través de la ventana?
Sí, son ejemplos algo tontos, pero ahora te pregunto:
¿Cuántas veces en el día le recuerdas a tus seres queridos que los amas?
¿Cuántas veces le das gracias a Dios por el simple hecho de estar vivo?
¿Cuántas veces le dedicas tiempo a escuchar a tus amigos?
¿Cuántas veces al día sonries o le dedicas tiempo a ser feliz?

Déjame decirte algo que ya sabes:
1)Las personas pueden irse cuándo menos lo esperas. ¿Qué te asegura que mañana o dentro de tres horas ellos (a quienes amas) seguirán allí contigo?

2)¿Qué te asegura que mañana estarás vivo? ¿O dentro de unas horas, minutos?

3)¿Que te asegura que justamente hoy tu amigo no necesitaba de ti una palabra de aliento o un abrazo... quizá solo una sonrisa? ¿Que te asegura que mañana estará allí para que pases tiempo con él/ella?

4)Los días nunca vuelven atrás y la vida es relativamente corta.
¿Pasarás la mayoría de las horas que restan de tu vida quejándote en vez de disfrutar al máximo cada momento, cada sonrisa?


Hay mil cosas tan simples pero tan importantes para nosotros y que pensamos que estarán allí el tiempo que nosotros queramos.
No es así.

Así que por qué no intentas tomar lo mejor de cada día y ser un poco más feliz?
No vale la pena gastar tu vida... porque tampoco sabes cuando va a terminar.

Así que nunca dudes en decir un te quiero, nunca pierdas la capacidad de admirar pequeñas cosas, nunca pierdas la capacidad de sorprenderte y nunca pierdas la dicha de sonreir.



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